Tribuna
Los planes educativos se deben adaptar hacia un futuro profesional más sostenible
Pau F. Aldomà
CEO
Transformar la industria de la construcción se ha convertido en una necesidad debido a los actuales retos de crecimiento poblacional y crisis medioambiental. Aunque el sector es uno de los mayores motores económicos y representa más del 10% del PIB mundial, también es el principal consumidor de recursos naturales del planeta
En este contexto, la economía circular se posiciona como una alternativa sólida tanto para entidades públicas como privadas, ambas en búsqueda de opciones para reducir el impacto negativo de la construcción. Ejemplos de estos esfuerzos incluyen Level(s), el marco europeo que evalúa la sostenibilidad de nuevos proyectos de construcción, y la Agenda 2030, que propone una reducción del 55% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030 y la neutralidad climática para 2050.
Con el objetivo de cumplir con las nuevas normativas, abordar las demandas presentes y futuras, y formar a líderes de la transición verde, muchos centros educativos han empezado a adaptar sus programas formativos a las directrices marcadas por los ODS.
La educación desempeña un papel fundamental en la consecución de los ODS. Al capacitar a los profesionales de la construcción, no solo estamos contribuyendo al desarrollo sostenible, sino también fomentando una cultura de responsabilidad y conciencia ambiental en la industria.
Desde ZIGURAT Institute of Technology se elaboran programas de formación que se alinean con el ODS 9 (Industria, Innovación e Infraestructura) y el ODS 11 (Ciudades y Comunidades Sostenibles). El ODS 9 aborda la necesidad de construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación. En cuanto al ODS 11, busca garantizar ciudades y asentamientos humanos inclusivos, seguros y sostenibles.
En este contexto, iniciativas como la Student Week de ZIGURAT Institute of Technology juegan un papel crucial. Este evento anual presencial para los Alumni de la institución se ha convertido en un espacio donde los estudiantes exploran y analizan temas relevantes relacionados con los ODS aplicados a la construcción.
Este año, los participantes han tenido la oportunidad de sumergirse en el barrio de Poblenou (Barcelona) y conocer de cerca las luces y sombras de la revolucionaria propuesta urbanística de las supermanzanas en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona.
Al proporcionar a los estudiantes la oportunidad de diseñar propuestas que mejoren el concepto de supermanzanas, el objetivo es contribuir activamente a la formación de líderes capaces de colaborar con personas de distintas culturas para alcanzar un mismo objetivo global: impulsar entornos urbanos eficientes y respetuosos con el medio ambiente.
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