El pasado 14 de diciembre, finalizó la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático 2018, la cual tiene el objetivo de impulsar y realizar un seguimiento de los avances del Acuerdo de París mediante la puesta en marcha de un programa de trabajo que garantice la transparencia de la acción por el clima.

Con motivo de la celebración de la Cumbre, Global Compact ha publicado un informe en el que se muestran las pautas para que empresas y gobiernos impulsen políticas que aceleren el crecimiento económico sin emisiones de carbono. El informe hace hincapié en la necesidad de que ambos, sector público y privado, trabajen de forma conjunta para conseguir metas más ambiciosas en materia de cambio climático, creando lo que llaman el “ambition loop”. Éste consiste en un ciclo de retroalimentación positiva en el que un liderazgo empresarial apoya una acción política que, a su vez, acelera la acción empresarial. En palabras de Lise Kingo, «Los compromisos públicos de las empresas con respecto a las medidas sobre el clima ayudan a demostrar los argumentos económicos en favor de una política climática ambiciosa, y esas medidas proporcionan a los gobiernos y a los inversores el apoyo que necesitan.“

Asimismo, el informe arroja ejemplos de cómo empresas líderes han ayudado a informar y apoyar políticas más fuertes y ambiciosas. De esta forma se muestra cómo el sector privado está reaccionando ante un creciente compromiso colectivo con un futuro sin emisiones de carbono, aumentando su propia acción climática y alineando sus planes estratégicos de crecimiento con los objetivos del Acuerdo de París. De hecho, cerca de 500 empresas ya se han comprometido a establecer objetivos de reducción de emisiones basados en la ciencia para cumplir con su parte y limitar el calentamiento por debajo de los 2°C, y otras 800 han indicado que planean hacerlo para 2019.

Y es que, las empresas ya ven la acción climática como un importante motor del crecimiento, la competitividad, la innovación y la gestión de riesgos. Se están dando cuenta de que el establecimiento y la consecución de los objetivos de reducción de las emisiones tiene un retorno de la inversión significativo. En 2016, 56 de las 100 empresas de la lista Fortune informaron que habían ahorrado un total combinado de 2.500 millones de dólares en proyectos de reducción de emisiones, con un período típico de amortización de entre 1 y 10 años. Este liderazgo y acción de las empresas ayuda a demostrar la viabilidad y la oportunidad en la transición hacia el carbono cero y, por lo tanto, ofrece apoyo económico y político a los gobiernos para que aumenten sus ambiciones de acuerdo con el Acuerdo de París.

En este sentido, Michał Kurtyka, presidente de la COP 24 y Secretario de Estado polaco en el Ministerio de Medio Ambiente, hizo hincapié en la importancia de que la industria respalde la acción gubernamental sobre el cambio climático durante la Reunión de Alto Nivel sobre el cuidado del clima en la COP 24. En sus palabras, «Los principios que los líderes mundiales acordaron hace tres años en París deben ser puestos en práctica. Se trata de nuestra acción colectiva y por eso estoy tan contento de estar aquí con ustedes, porque demuestran que es posible, que es factible, que podría ser rentable – es rentable – y que cada vez más, desde su perspectiva, es también una oportunidad en lugar de un coste».

Por último, como otra acción vinculada a la reducción de las emisiones de carbono, el Pacto Mundial de las Naciones Unidas también lanzará una nueva asociación con la empresa Volans, con sede en Londres, antes de la Cumbre del Clima de 2019, para movilizar a las empresas líderes a fin de que se comprometan a construir una nueva economía del carbono, en la que las empresas inhiban más carbono del que emiten a través de sus operaciones. Esta acción pretende ser una incubadora para ayudar a las empresas que participan en el Pacto Mundial de las Naciones Unidas a proporcionar contribuciones ambiciosas y significativas a la Cumbre.

Puedes descargar la guía “The Ambition Loop” aquí.